nuestros vinos
Vinos moldeados por el viento, la piedra y el tiempo.
Hacemos el vino como vivimos: cerca de la tierra, dejándonos llevar por la curiosidad. Sin añadidos, sin trucos. Sin sulfitos, sin correcciones, sin prisas. Solo uvas, levaduras salvajes y tiempo.
Nuestra viña está a 600 m de altitud, en las laderas de la Serra de São Mamede. Las cepas crecen sin riego, hundiendo sus raíces en cuarzo y esquisto. No usamos químicos. No buscamos que todo salga igual. Dejamos que cada año cuente su historia.
En la bodega no seguimos recetas. Seguimos el instinto. Probamos, esperamos, reaccionamos. Cada vino es un experimento: a veces juguetón, a veces paciente. Siempre sincero. Trabajamos con pequeñas cantidades, lo justo de equipo, y muchas ganas de explorar.
Nuestros vinos están hechos para compartir.
Cada botella guarda un poco de alegría, un poco de magia. Ninguna es igual a otra – como los recuerdos que nacen al abrirlas.
Ábrela con amigos. Deja que lo demás se despliegue solo.
Fortified by Nature, 2023
Moldeado por el sol, el viento y la lluvia.
Hicimos un vino tinto y paramos la fermentación antes de tiempo con aguardiente de uva de un vecino. Lo dejamos en una garrafa de vidrio gigante al aire libre: sol, frío, lluvia. No lo cerramos del todo. Lo dejamos respirar. El resultado: un vino dulce, fortificado, con alma salvaje.
Fieldblend Pet Nat, 2023
Burbujeo de cereza.
Nadie sabe muy bien qué crece en la parte baja del viñedo —y eso nos encanta. Vendimiamos esas uvas misteriosas en dos días distintos, juntamos los mostos ya fermentando, y embotellamos con vida dentro. Las burbujas terminaron de formarse en botella. Es chispeante, jugoso, ideal bien frío.
Trincadeira Orange de Noir, 2023
Tarta de ruibarbo y natillas, en versión vino.
La Trincadeira suele ser potente y tinta. La nuestra no. La prensamos justo al vendimiar, sacando solo un toque de color. El resultado: un vino rosado-anaranjado, fermentado en acero. Luminoso, raro, con mucha personalidad.
Fieldblend in Stein, 2023
Este vino va por libre.
Vendimiamos todo lo que había en la parte baja del viñedo —una mezcla total. Lo estrujamos, lo fermentamos tal cual, y luego lo prensamos suave.
Después lo pasamos a un stein: un recipiente de cerámica usado antes para cerveza. Sin madera. Sin historias. Solo fruta, fermento y barro.
No sabe nada a cerveza, pero tiene ese frescor limpio, un punto jugoso, algo salvaje. Como nos gusta.
Carbonic Maceration Trincadeira, 2023
Explosión de fruta.
Cogimos los racimos más bonitos de Trincadeira y los metimos enteros en un tanque cerrado con CO₂. Fermentaron desde dentro. Sin oxígeno. Sin prensar. Solo fresas, frambuesas y alegría. Un vino ligero y frutal, perfecto para un picnic entre viñas.
Aragonez in Clay, 2023
Moon Trip Wine
Fresco, afrutado, con acidez que hace salivar —este vino se crió en una vasija redonda y blanca de arcilla que llamamos Luna. Es como una ánfora, pero con una arcilla más fina que no necesita revestimiento.
Ligero y profundo a la vez, es como hacer un viaje lento a la luna… y volver.
White Grapes Fermented, 2023
Crisp!
Vendimiamos una parcela mixta, donde las blancas y las tintas crecen juntas. La mayoría de las blancas se prensaron el mismo día. ¿Todas? No. Dejamos un 10 % sin tocar.
Esas uvas enteras se metieron en el mosto fermentando. Se quedaron ahí, en silencio, todo el invierno, en acero inoxidable, con aire por arriba. Sin prisa. Sin lío.
En primavera trasegamos el vino. El resultado: una mezcla blanca viva, afrutada y con chispa —como el último sol del verano.